A veces no tenemos tiempo para reposar, para buscar un poco de calma en nuestras vidas, el mundo de hoy es un constante ir y venir ¿dónde quedan aquellos momentos para disfrutar de un OCASO?.
EL OCASO
A veces me resulta imposible
caminar en línea recta,
sin querer voy pasando obstáculos
por las esquinas de la vida.
Con el paso de los años,
quiero imprimir velocidad
a mis talones,
pero me doy cuenta
que ellos desean quedarse acostados.
No logro llegar a tiempo,
las citas ahora son más lejanas,
el invierno cada vez más frío,
mi cuerpo cada vez más opaco.
Las noches resultan muy extensas,
largas, como túneles interminables,
el sueño corto y sin intensidad,
volver a la cumbre es todo un reto.
Mis piernas y mi mente sumidas en el ocaso.
Los niños juegan en el parque
como siempre han jugado;
yo me siento y sonrío,
aún me queda algo por hacer
¿será quizás descubrir la calma?.
A veces me resulta imposible
caminar en línea recta,
sin querer voy pasando obstáculos
por las esquinas de la vida.
Con el paso de los años,
quiero imprimir velocidad
a mis talones,
pero me doy cuenta
que ellos desean quedarse acostados.
No logro llegar a tiempo,
las citas ahora son más lejanas,
el invierno cada vez más frío,
mi cuerpo cada vez más opaco.
Las noches resultan muy extensas,
largas, como túneles interminables,
el sueño corto y sin intensidad,
volver a la cumbre es todo un reto.
Mis piernas y mi mente sumidas en el ocaso.
Los niños juegan en el parque
como siempre han jugado;
yo me siento y sonrío,
aún me queda algo por hacer
¿será quizás descubrir la calma?.
22 comentarios:
Muy hermoso. El tiempo sin querer nos va carcomiendo y apenas tenemos minutos para sentarnos delante de nuestro propio espejo. Un poema precioso. Un beso grande.
Quizás Santiago todo te empuje a disfrutar ahora de la paz que antes con las prisas de la juventud dejabas escapar...
Un abrazo
Hola, Santiago.
Es tiempo de serenarse y disfrutar de los pequeños placeres.
Donde se ponga un ocaso, un poeta o un niño jugando que se quiten las prisas, las noches interminables y la pereza de que no queda nada por descubrir.
Besos, poeta, más tierno que rudo.
El tiempo nos hace más lentos pero más sabios.
Un cordial saludo
sentidos y reflexivos versos querido Santiago,
el ocaso una palabra polisémica ,
tú sabes certeramente armar en imagenes y trasmitirnos sensaciones por las que pasa este hablante .
realmente un placer leerte
besitos de luz
ten un domingo precioso!!
La calma...
A veces, la rozamos, pero siempre se nos escapa.
Precioso poema
Abrazos a repartir
Yo soy de los que piensan que el ocaso trae las olas en calma.
Abrazos
Muy bello este ocaso, para disfrutarlo y paladearlo con calma, mucha calma.
un abrazo
Querido Santiago:
Que mejor con un ocaso para disfrutar de la calma.
Bello poema. ¡Ojalá encontráramos más instantes de paz al día!
Un abrazo.
Triste la etapa del ocaso que tan perfectamente has descrito. Yo pienso en como será cuando me toque, e imagino exactamente lo que dicen tus letras.
Seguramente la solución, no para evitar esa etapa, sino para saber llevarla, es como dices, descubrir la calma.
Un abrazo
Disfrutar de un rato de calma en nuestras aceleradas vidas, es todo un placer. Pero ya sabes si después de la tempestad llega la calma, si disfrutamos calma seguramente llegue después la tempestad.
Yo entre tanta tormenta te envio un saludo y gracias por permtirnos disfrutar de este rato de calma a tu lado.
Cris
Hallar la calma y el sosiego no es tarea fácil cuando se libran tormentas en nuestros interior y el cuerpo ya está cansado por los estragos del tiempo en su piel.
Bello poema.
saludos
Siempre he creido que es un momento único e irrepetible.Nunca es igual, ese instante precioso en el que convergen el día y la noche.
Precioso.
Un abrazo
Hola Santiago: La calma es muy importante, estar sosegados, lo mejor.
Muchas gracias por visitarme en mi blog de "pelusa", ya estoy en "on", en el blog de "ni un puntito...", he escrito un cuento y dos poemas, bueno, no sé si llamarlos poemas, yo escribo sin tener encuenta la rima, porque entre otras cosas, me sería imposible de escribir teniéndola en cuenta.
un abrazo
Maite
Se me olvidó, el poema es hermoso, y la fotografía preciosa.
besos
Maite
Seguro que sí, la calma, la serenidad, la paz... ¿y por qué no muchas cosas más?
Me encanta tu poema y me siento muy identificada con la mayoría de sus versos.
Un beso, Santiago.
Santiago:
El tiempo lo dice todo, nosotros nada más hacemos la transferencia.
Y como tú dices:
yo me siento y sonrío
Saludos hermano.
Pedí a Dios que desde hoy nos renueve la ilusión y que el Niño Jesús entre en nuestros corazones para honrarlo y conservarlo y así hacer de nuestras vidas una eterna Navidad. TQM. Gracias por existir.
Santi amigo mio,
estoy con la lectura de tu libro y no soy quien a acabar, según llego a la última página salto de nuevo a la primera y así una y otra vez. Vas a tener que escribir otro o permaneceré en este bucle indefinidamente.
Un apasionado abrazo de admiración.
la calma y la serenidad nos ayudan a vivir de otra manera...
hermosos versos..
gracias por compartir!!
besosssssssssssssssss
La calma es dulce y sosegada...
Hay que disfrutar de ella.
Como siempre, versos de lujo.
Un abrazo.
Nada como encontrar la calma en la mente y en el corazón.
Beso para ti, Santi.
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