LAS GENERACIONES (2)

( continuación de parte primera las generaciones (1) )

Acercó su morro a la barrera y se encendió la luz de indicación "INTRODUZCA SU DINERO Y RECOJA SU TIKET". Así lo hizo, recogió el billete y se preparó para triunfar. Una vez dentro, se dirigió al servicio, se echó un poco de agua por encima y se abrillantó, a continuación se pasó un trapo y él mismo se dijo:
---Verdaderamente estoy bien, hay que aprovechar que solo se vive una vez, aunque los viejos digan otras cosas.---se acercó pausadamente a la barra del nigth entre la música muy alta y el ruido típico de esta clase de discotecas, también un característico olor a porro se escapaba en el ambiente, el local parecía un puchero a presión si se se hubiese podido quitar una ficticia tapa, hubiera salido una gran cantidad de denso humo.
Ya en la barra apoyado y entre mirada y mirada se apresuró a pedir.
---¡Hola tio!---saludó la barman---dame un vaso de tubo bien cargado de gasolina con plomo, necesito ponerme un poco a tono.
---ok--- contestó el barman sin mucha alegría. En un momento la bebida alcohólica estaba encima del mostrador; YOUNG se la tomo de un trago largo, paladeo en dos ocasiones el rico néctar y pidió otro. Su mirada escudriñó una banda del local donde sus focos detectaron una preciosa CARAVANA rubia, asombrosa, se tomó el segundo vaso y sin apartar sus focos de la rubia pidió el tercero y pensó:
---¡ Madre mía qué tia !ésta es mi noche de suerte, a ver que tal me porto hoy---sin más dilación encaminó sus ruedas hacía el lugar para parar delante de la bonita criatura, pasar el rato lo mejor posible y por que no, intentar frotar un poquito el chasis.
--- ¡hola!...¿quieres bailar?---preguntó
---bueno---contesto la Caravana indiferentemente y rodó hacía la pista, detrás iba YOUNG, mientras les acompañaba una música metálica, una percusión persistente y una letra repetitiva y monótona, para ellos era igual ya que entablaron conversación aunque tenían que hablar a gritos, es la moda hoy en las discotecas.
YOUNG se puso cerca de la muchacha y ambos comenzaron a moverse al ritmo del brillante compás, con un peculiar meneo de espejos, cada vez que hablaban se tenían que pegar un o al otro.
---¿cómo te llamas encanto?---preguntó YOUNG.
---"FINE LINE", pero mis amigas me llaman FINE....¿y tú?.
---"YOUNG-FANTASIA, pero mis amigas me llaman YOUNG---contestó en tono gracioso y sonrió. Mientras hablaban, YOUNG sacó tabaco y chocolate y fue liando un porro, lo encendió y dio algunas caladas largas y ondas, echando el humo con gran destreza por su tubo de escape.
---Toma---ofreció acercando el porro a la chica---¿quieres unas caladas? esto te pondrá a tono.
---¡No! yo no fumo esas porquerías, además, estoy en total desacuerdo con cualquier tipo de droga incluso con el porro creo que.....---YOUNG corto rápidamente.
---Bueno, bueno chica, tampoco es para tanto por un porro no pasa nada---y volvió a fumar saboreando más aún si cabe que las caladas anteriores.
---Vamos a sentarnos---sugirió YOUNG.
---Está bien---asintió la chica. Se sentaron y más tranquilos comenzaron a charlar.
---¿ Y tú que haces, trabajas, estudias?---preguntó FINE.
---Bueno hago lo que tercia, un día trabajo, otro estudio, otro día le pido a mis viejos un poco de tela, pero no me gusta estar fijo en ningún sitio, lo que me gusta es divertirme y cuanto más mejor.---asintió decidido YOUNG.
---Yo creo que se debe hacer algo más en esta vida, a parte de divertirse que no está mal, yo estoy estudiando, después de estudiar trabajo para sacarme una perrillas, no me gusta nada tener que depender de mis padres, siempre me han ayudado y creo que no es justo continuar sangrándoles de continuo.---terminó Fine de una forma sencilla y directa.
---No me cuentes historias raras chiquilla, hay un refrán que dice muy acertado:
"VIVE DE TUS PADRES HASTA QUE PUEDAS VIVIR DE TUS HIJOS". asentó YOUNG.
---Yo no estoy de acuerdo con tu filosofía, creo que les debemos algo a las generaciones anteriores. Sin darse cuenta y charla tras charla, la madrugada llegó y la sala de fiestas iba a cerrar, YOUNG más amablemente se despidió.
---Bueno FINE, hasta otro día ¿qué te parece si quedamos para el sábado o domingo?.
---Bien ya veré...si vengo y estás podemos continuar charlando, pero sin porros, adiós. La muchacha giró sobre su chasis rápidamente y se apresuró a buscar la salida.
---¡Joder!...menuda puritana,no la gusta el porro, la gusta estudiar, y de arrimar nada
pero...---YOUNG se quedó pensativo y continuó---la verdad no he estado tan mal, además para pasar un rato que más da.
YOUNG salió de la discoteca y se rodó por el mismo camino que había llevado unas horas antes,
paró en el mismo semáforo pero en sentido contrario; el semáforo destellaba su color rojo YOUNG empezó ha hacer rugir su motor de forma continua como queriendo salir precipitadamente en busca de algo o de alguien, en el otro sentido de la calzada paró otro coche, los dos se enfocaron, ¿se conocían? ¿se habían visto antes?, ¡claro que sí! el otro coche era OLD.

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---¡ Ea mira el abuelete ! ¿dónde irá a estas horas? seguro que a currelar, vaya vida---pensó YOUNG.
---Mira este desgraciado, ya habrá estado por ahí drogándose, robando...o vete a saber que--- pensó OLD.
YOUNG había acertado OLD se dirigía a trabajar, era su último día de trabajo. se jubilaba, había servido desde muy joven en la casa de un ministro y por su dedicación ascendió a coche oficial, lo cual era un orgullo para él y para su familia. OLD estaba un poco equivocado en sus afirmaciones ya que YOUNG a pesar de su forma de ser, nunca había robado, era un poco balarrasa pero no era mala persona. Otra vez las generaciones se habían juntado sin querer.
OLD pensaba que ya había dado todo lo que tenía que dar en este mundo, tanto en su trabajo diario como con su familia, ahora se dedicaría a pasear con su nieto, a viajar y ver algunas ciudades ya que no las pudo ver de joven y cuando lo hacía era por trabajo y no por placer, disfrutaré un poco de la vida, se decía una y otra vez.
YOUNG por el contrario, se preguntaba como engañar un poco a su madre para obtener algo de dinero extra, que discoteca le iría mejor para la próxima semana y en volver a ver a su reciente y flamante chavala; cuando recordó a la muchacha, una sombra paseó por su mente, algo no funcionaba, tenían la misma edad y por pensamiento ella parecía una vieja.
---¿o estaré yo equivocado? se pregunto YOUNG; no tuvo tiempo de contestarse ni de continuar con su reflexión. los semáforos guiñaron sus ojos verdes y los dos coches se cruzaron cada uno en dirección opuesta, OLD hacía su último día de dedicación y esfuerzo y trabajo, y YOUNG a pillar su parcela para poder pegar un poco los faros, aunque al otro día no tenía que madrugar.
Así pasaba la vida de estos dos seres tan distintos, día a día cada uno desempeñaba su función, o por lo menos cada uno pensaba que la desempeñaba bien, además, tanto uno como otro pensaba que el equivocado era el otro y no el uno, quién sabe si una tercera persona ajena a ambos, hubiera podido dilucidar este terrible entramado, dependiendo de la edad tal vez se hubiese inclinado de un lado u otro la balanza, pero...¿hubiese sido justa).
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---OLD saca al niño a pasear.
---¡ya voy! ¡ya voy! Mmmmm... esto si que es vida---¡oye! se dirigió a su mujer.
---esta tarde podemos ir al cine, proyectan un de esas películas de nuestro tiempo, ¿qué te parece?.
---Bien, muy bien---asintió la mujer---pero ahora lleva al niño a dar el paseo y no tardes.

OLD tomó al muchacho por el manillar y emprendió la marcha mientras le contaba una de esas historias que a todo niño le gusta que le cuente su abuelo, un poco de verdad y un poco de exagerada, aún así mantenía viva la atención del muchacho. OLD y el pequeño pararon en el semáforo a esperar que el disco les diera paso, en ese momento en el carril central y del mismo sentido paró YOUNG, como en ocasiones anteriores las miradas se cruzaron, esta vez una mirada más, la del pequeño, no hubo mucho tiempo el semáforo dio su autoritaria orden y los tres emprendieron la marcha OLD y su nieto con tranquila parsimonia, mientras que YOUNG aceleró y se perdió en un instante por la curva.
---¡Maldita sea ! estos jóvenes... apuntó OLD.
---¿qué dices abuelo? pregunto el chiquillo.
---Nada, nada, voy a continuar contándote la historia que nos tenía ocupados, escucha atentamente y no te pierdas el final, es lo más importante de todo.
---bien abuelo---asintió el muchacho con una atención desorbitada.
Mientras OLD continuaba contando y gesticulando su historial a su nieto, y sin darse cuenta de que habían caminado un gran rato, divisó a lo lejos un coche con el capó levantado pero como su cansada vista ya no funcionaba bien no se percató de quien era hasta que estuvo muy cerca.
---¡hombre! dijo para sí---¡pero si es mi amigo!---¿qué le pasará? me acercaré a ver--- dicho y hecho, OLD se acercó.
---¡Eh muchacho! ¿qué te pasa?, no debes andar tan alocado, no es bueno para nadie---recriminó OLD.
---No sé, parece que tengo un pequeño calentón en todo mi motor y no acierto a saber de que puede ser---contestó YOUNG.
---Déjame echarte un vistazo, mi experiencia puede que te sirva de ayuda---contesto con orgullo OLD.
Se acercó y miró muy atentamente todas las partes del motor, al momento se percató de la avería.
---chico, tienes que echar agua al motor de vez en cuando---le dijo en tono socarrón.
---no lo sabía---respondió YOUNG
---Bueno, yo puedo darte de la mía, es conveniente llevar una garrafa de agua en el maletero por si hay que añadir al igual que el aceite---OLD sacó la garrafa de su maletero y se apresuró a llenar el depósito de YOUNG; mientras ocurría el desenlace, el nieto de OLD se acercó al borde de la calzada jugando, ajeno a todo lo que estaba pasando, su pequeña rueda tropezó con unas piedras que descansaban en el asfalto y se precipitó al barranco, OLD estaba terminando de llenar el deposito de YOUNG cuando ambos oyeron los gritos del pequeño.
---¡abuelo, abuelo!---llamaba angustiado.
Rápidos OLD y YOUNG se acercaron al lugar, pero ahora hablo YOUNG.
---¡espera un momento! dijo con energía---tú no puedes bajar hasta donde está tu nieto, ahora mi agilidad servirá tanto como tu experiencia---sin decir una palabra más, se precipitó en busca del pequeño, lo cogió con fuerza y tiró de él de forma decidida hasta que lo subió a la carretera.
---gracias---dijo OLD abrazando al pequeño---muchas gracias--- insistió.
---bueno amigo no fue tan difícil---contesto YOUNG con una pequeña sonrisa. El tiempo pareció parar, los tres se miraron guardando un silencio sepulcral. OLD extendió la rueda y YOUNG la tomó, y como por acto reflejo los dos con las ruedas que quedaban libres se apoyaron en el pequeño, de tal forma que los tres formaron por un momento uno, se veía que por una vez, dos generaciones, se habían unido, para salvar a otra generación, uno aportando su sabiduría, otro su juventud y gracias a ello sacaron adelante a un miembro de otra generación. Por una vez se dieron cuenta que todos TENEMOS ALGO QUE APRENDER Y ALGO QUE ENSEÑAR.

fin del cuento
Si te gusta y lo quieres copiar no me importa, pero se honesto y menciona al autor
muchas gracias
Santiago